Edad Media

David Martínez Pérez (Historiador)

Volvemos a encontrar referencias al Páramo en la Alta Edad Media, en el año 458 se enfrentaron los ejércitos de los suevos dirigidos por Requiario y los visigodos mandados a su vez por Teodorico II . Sabemos que fue cerca del río Órbigo pero las distintas fuentes difieren en el lugar exacto. Para San Isidoro en la Historia de los Godos se enfrentaron a doce millas de Astorga junto al río Órbigo, con él coincide la Crónica de Idacio. La crónica de Máximo de Zaragoza señala que tuvo lugar in campo Parami. Con este coinciden los autores Marcelo Macías y Matías Rodríguez. El bañezano M. F. Fernández Núñez, aceptando que fue a doce millas de Astorga, junto al río Órbigo y en el Páramo, propone que se dio en el puente del Paulón, situado éste entre Requejo de la Vega y el despoblado de campo de Hinojo. Es necesario puntualizar que la frontera entre los reinos visigodo y suevo estuvo situada en el río Órbigo, así el Páramo estaría en territorio visigodo, mientras que la margen opuesta del Órbigo pertenecía al reino suevo.

Luis Pastrana en su referido libro sigue las ideas que Sánchez Albornoz plasmó en Despoblación y repoblación del valle del Duero. Básicamente dice que después de grandes destrucciones tras la invasión árabe y ante la dureza del terreno lo más probable era que existiese una despoblación generalizada de la cuenca del Duero. Albornoz se apoya al afirmar esto en que la población huyó a refugiarse en las montañas, y en que el mismo Alfonso III mencionó la desolación en la que se encontraba León.

Ésta es una visión mal interpretada. Hoy se afirma que Albornoz se refería a que no existían comunidades organizadas y controladas por un determinado poder, pero esto no contradice la posible existencia de poblados campesinos (como muestra la arqueología) que no estuviesen subordinados a un poder superior.

Por una donación de Alfonso III hecha en Oviedo en el 906 encontramos un lugar llamado San Emiliano (que probablemente sería San Millán de los Caballeros) que tiene como límites lugares como Laguna o Zuares.

En una donación del abad Iquila al monasterio leonés de Santiago hecha el 26 de junio del 917 aparecen Bercianos y además Mata de Rege (Mata del Páramo) y Fontecta (Fontecha). En una escritura posterior se otorga una heredad donde aparece la palabra Páramo, lo que muestra que este topónimo se había conservado por lo que un reducto de población se mantuvo en el Páramo después de la invasión musulmana hasta la repoblación. En este momento surgen los monasterios de Santa María y Santiago en Valdevimbre, y el de los santos Justo y Pastor en Cillanueva, éste último con un importante peso mozárabe. Los mozárabes según la visión tradicional eran los cristianos emigrados de al-Andalus tras las persecuciones religiosas que sufrieron en el siglo X. La abundancia de topónimos mozárabes que aparecen a mediados del siglo X hace pensar que estos hacen un verdadero poblamiento del Páramo de dimensiones desconocidas hasta ese momento. Sin embargo hoy se resalta más su participación en la fundación de monasterios que en la repoblación.

En esta segunda mitad del siglo X aparecen centros monásticos de poca importancia y no perfectamente regularizados que pasarán a depender de otros más importantes de fuera del Páramo. Podemos citar como ejemplos los monasterios de San Salvador de Zotes y el de San Pedro de Negrillos. En el siglo XI aumentan los documentos que hacen referencia al Páramo, destacando las donaciones hechas a monasterios.

Es destacable la batalla que tuvo lugar en 1111 en Villadangos entre los partidarios del niño Alfonso VII y Doña Urraca, que había sido coronado Rey de Galicia y venía a ser coronado rey de León, y Alfonso I el Batallador, Rey de Aragón y esposo de la Reina Urraca que era la madre de Alfonso VII. Alfonso I quería dirigir los asuntos leoneses, pero se le oponía su mujer, por otro lado los partidarios de Alfonso VII creían que con este se volvería a la época esplendorosa de Alfonso VI.

En el año1157 el obispo leonés Diego otorgó cinco cartas de behetría que afectaban al Páramo: la de Pobladura de la Mata, la de Sardonedo, la de San Martín de Bustillo y Bustillo de San Miguel y la de Villagallegos y Bercianos. Estas cartas otorgaban ciertos derechos a estos lugares, como poder elegir el señor al que se subordinaban, ya que estaban poblados por hombres libres.

Tendrán posesiones en El Páramo diversas órdenes militares y monasterios. Destacan la Orden Militar de San Marcos de León con Fojedo y Moralinas, y el monasterio de Carrizo con San Pedro del Páramo. También el monasterio de San Pedro de Montes con Azares, y San Isidoro de León que tendrá posesiones en muy diversos lugares del Páramo , entre ellos Laguna de Negrillos , Matalobos y Villazala, otorgando a los dos últimos un fuero a cada uno.

Castillo de Laguna de Negrillos. Alfonso IX de León otorgó un fuero a Laguna de Negrillos y su alfoz de trece aldeas en el año 1205, en este fuero ya se habla de la existencia de un castillo, sin embargo los restos que hoy podemos contemplar fueron erigidos en el siglo XIV por Diego Fernández de Quiñones y María de Toledo, padres de Don Suero de Quiñones, esta fortaleza poseía adarves, saeteras, torres de flanqueo, letrinas, varios cubos y un torreón, el alcázar tenía cinco plantas, con puertas de arco agudo y ventanas de arco redondo.

Se asentará con fuerza la nobleza en el Páramo a partir del siglo XIV. Hasta 1363 Pedro Álvarez Osorio tendrá derechos sobre una parte importante del Páramo. Tras su muerte en 1365 el Rey Pedro I amplió el alfoz de León con una cantidad importante de territorios del Páramo que poseía antes Pedro Álvarez Osorio. Pero chocó con los derechos eclesiásticos, como se ve en la polémica de Villar de Mazarife. Aquí la iglesia de León tenía su dominio, pertenecía al alfoz de León y sus habitantes se consideraban de behetría (creían que podían elegir libremente a su señor). Por decisiones judiciales pasó a dominar el alfoz de León (territorio directamente dependiente de la ciudad de León en materia judicial y de impuestos).

Los Quiñones tendrán un papel destacado en El Páramo al controlar en el siglo XIII Santa María del Páramo y en el siglo XIV Laguna de Negrillos. En 1465 Enrique IV concede a Alvar Pérez Osorio el marquesado de Astorga pasando a controlar casi todo el Páramo, excepto las posesiones de los Quiñones y algunas de la iglesia de Astorga, de este modo se titulará señor del Páramo.

Laguna de Negrillos fue la capital histórica del Páramo desde que fue repoblada, en 1205 (según Julio González) y en ese año recibió su fuero (según Justiniano Rodríguez), mientras que la capital económica del Páramo ha sido Santa María del Páramo. A finales del siglo XIV los Quiñones pasan a controlar Laguna, haciéndola el centro de sus posesiones en el Páramo. Ilustre vecino de esta población fue Cipriano de la Huerga destacando como teólogo, poeta, biblista y maestro de Fray Luis de León. En 1920 el censo muestra como Santa María ha superado en número de habitantes a Laguna, pasando así a tener esta menos importancia.